martes, 20 de mayo de 2014

La red de prostitución del PRI en el DF

En el ya lejano 2003, el periódico Reforma y algún otro medio, publicaron que Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre prostituía mujeres y que sus sueldos se pagaban con el dinero que el IFE le da al PRI o, como era diputado en ese entonces, tal vez se las pagaba la cámara como "asistentes", luego, tiempo después, el PRI pagó más de un millón de pesos por indemnización a otras mujeres prostituídas por el mismo personaje.
Como algunas muchachas se acercaron a una de las contadísimas periodistas honestas de este país: Carmen Aristegui en son de queja (porque es totalmente inútil quejarse ante las autoridades correspondientes) Aristegui y su personal decidieron mandar una reportera simulando estar solicitando uno de los empleos de edecán solicitadas mediante anuncios en el aviso oportuno de la prensa y en la página de Facebook de Priscila Martínez, enganchadora de Gutiérrez de la Torre.
Un error que cometió el equipo de Aristegui fue no utilizar una videocámara (son minúsculas y hasta baratas y las venden en muchas partes, aparte de Mercado Libre) utilizaron solo una grabadora de voz. Cuando tuvieron la grabación, la hicieron pública y algunas personas del propio PRI, entre ellas María de los Ángeles Moreno, demandaron la expulsión inmediata de Gutiérrez de la Torre (obviamente lo hicieron porque conocen los antecedentes de este señor).
Creo que ni Televisa (uno de los más grandes prostíbulos del país) se atrevió a defender al delincuente sexual. Mileno, por medio de Ciro Gómez Leyva lo hizo. En su odio por la rectitud, fama y honestidad de Carmen Aristegui le dio cabida a dos empleadas de Gutiérrez de la Torre y se hizo eco de unas declaraciones por escrito de Priscila Martínez-
Cualquier litigante, al leer esas declaraciones, al conocer que no se atrevieron a que las ofreciera oralmente y que fueron por escrito, nota de inmediato, la mano de litigantes o de personas que fueron agentes del ministerio público o jueces... nada más faltó que dijeran, "la de la voz", "usía" o "su señoría" (hasta eso que tuvieron cuidado).
Gómez Leyva, pese a que debe saber los antecedentes de Gutiérrez de la Torre, pese a las evidencias, pese a que en su fuero interno reconoce que Carmen Aristegui es una verdadera profesional del periodismo, se ha exhibido igual o peor que cuando presumía de las encuestas a favor de Peña Nieto, revolcándose en el lodo de la desvergüenza y exhibiéndose como corrupto.

"Ni Reyna, ni Gutiérrez de la Torre afectan al PRI" Emilio Gamboa Patrón

Es cierto lo que dice el priísta Emilio Gamboa Patrón, pero interpretado de otra forma, ni Reyna (el ex gobernador interino de Michoacán), ni Cuauhtémoc Gutiérrez afectan al PRI, el excremento apestoso de las decenas de miles de priístas corruptos, si sufrieran al unísono un ataque de soltura estomacal, no alterarían la pestilencia priísta, sería más o menos la misma.
¿Que Reyna tuvo nexos con los narcos? Miles de priístas los han tenido y más fuertes incluso, los narcos han apoyado económicamente y con otros recursos sus campañas políticas, en la elección de 2012, entre López Obrador, la Mota y Peña Nieto, es obvio que preferían a este último y deben haberlo apoyado.
¿Que Gutiérrez prostituyó muchachas? Híjole, aquí sí que hay tela de donde cortar: el PRI lo ha prostituido todo, a la Suprema Corta (los magistrados con los sueldos más altos del mundo entero, aparte de las mordidas), a los jueces, a los ministerios públicos, a las fuerzas armadas, a los medios, a los sindicatos,  a las encuestadoras, a los textoservidores, al IFE, al TRIFE (¡declararon que el único que rebasó los gastos de campaña fue el que menos gastó de los tres más importantes candidatos a la presidencia y no vieron la compra de un solo voto por parte de Peña Nieto!), a los líderes obreros, a los líderes campesinos, a cientos de supuestos intelectuales, a la iglesia misma, prácticamente a todo aquel que entre en contacto con ellos, lo han prostituido. ¿Cómo un panzón que ha prostituído a cien o doscientas mujeres puede manchar una trayectoria como la priísta? No mamen! No exageren!
Finalmente: a la luz de que no aparecen muchas mujeres denunciando a Gutiérrez de la Torre (no lo hacen en su mayoría porque se sienten culpables, lo que hicieron no es el proceder de una mujer honesta, pese a su desempleo y pobreza; pero también por la desconfianza en las autoridades, por el temor a las represalias y vaya  usted a saber por qué otras razones). No han aparecido, además, porque me temo que la mancuerna Priscila-Cuauhtémoc Gutiérrez son proveedores de prestadoras de servicios sexuales para los mandos medios y superiores del PRI. Es decir, muchas de las contratadas por Priscila y Gutiérrez temen ser exhibidas públicamente y quedarse sin los ocho o doce mil pesos al mes que se les pagan.
Yo he conocido mujeres que se acuestan nada más a cambio de conocer los chismes de la política o participar en los entresijos del poder y he conocido a varios personajes del PRI que la hicieron -uno de ellos llegó a Gobernador de Jalisco-- utilizando prestadoras de servicios sexuales, no sé si todas profesionales o no y finalmente, por el sexo, los hombres somos capaces de muchas canalladas y barbaridades... ¡hasta de casarnos, para acabar pronto!

En relación a un poema palestino

El poder de la palabra. La piel se me puso de gallina. //Formidable intervención. Gran luchadora

Este es el twitt de John Ackerman, publicado el 20 de mayo de 2014.
Me recordó una historia:

El General de División Álvaro Vallarta Ceceña, cuando era apenas Coronel, nos contó que los altos mandos del Ejército lo mandaron a Israel .
Como invitado del Ejército y gobierno israelí, le pusieron de Cicerone un militar del mismo rango que él, un coronel.
Como iban a visitar un terreno habitado por palestinos o un territorio ocupado, al subir al Jeep el coronel israelí colocó su pistola en la guantera. Como el Coronel mexicano hiciera una cara de sorpresa, le comentó que tenía órdenes superiores de contestar a balazos si los niños y muchachos palestinos le tiraban piedras...
Cuando nos terminó de platicar ésto, sentí ganas de comentarle que yo en su caso, en ese mismo momento le pido que pare el vehículo, me bajo del Jeep y me regreso a México, sin importar que mis superiores me regañen o castiguen, que creo que por el honor militar, el honor de la guerra, solo se puede llamar asesinato al hecho de responder a pedradas con balazos.
Junto con el remordimiento de no haber tenido el valor para hacerle ese comentario al General Vallarta, me quedó otro pensamiento en la mente:
Si yo fuera un niño o un joven palestino y si los israelíes hubieran matado a mi padre, a mi abuelo o a uno de mis hermanos, lo menos que les tiraría serían piedras, aparte de las mentadas de madre.