Artículo
370.- Cuando el valor de lo robado no exceda de cien veces el
salario, se impondrá hasta dos años de prisión y multa hasta de cien veces el
salario.
Cuando
exceda de quinientas veces el salario, la sanción será de cuatro a diez años de
prisión y multa de ciento ochenta hasta quinientas veces el salario.
Si fuéramos un país civilizado, si hubiera democracia, Enrique Peña
Nieto sería destituido y encarcelado por lo que se robó como gobernador del
Estado de México y por lo que se está robando a la vista de todos, como
presidente, de un cargo que compró con
dinero robado precisamente…
Debemos explicar a cuanta gente alcancemos
a explicarle que Peña Nieto y sus treinta ladrones nos están robando a todos,
nos roban el alimento de nuestros hijos; nos roban en cuanto aumentan el precio
de los frijoles, el maíz, las verduras, la legumbre, la carne; nos roba las
escuelas, los pizarrones, los gises, los mesabancos; los hospitales; las
medicinas en el Seguro y el ISSSTE; las citas hasta dentro de tres meses; las
operaciones cuatro o cinco después de cuando se necesitan; que nos roban
carreteras, puertos, vías de ferrocarril, el agua potable; la electricidad y la
gasolina caras; los salarios de hambre…
Y los robados somos todos los mexicanos con
la excepción de unos cuantos: a saber: los 30 barones a los que les devuelven
los impuestos, desde luego al dueño de HIGA, los periodi$tas corruptos, la
curia, unos cuantos; así que nos roba a millones de obreros, campesinos,
empresarios. Los únicos que no tienen razones para quejarse son los barones y
las transnacionales, porque no pagan impuestos.
Debemos, con urgencia, encontrar la manera
de que los pequeños y medianos empresarios, los profesionistas, los periodistas
no corruptos se den cuenta del saqueo y la corrupción que tanto nos dañan.
Son realmente poquísimos los beneficiados
de la corrupción peñanietista, los demás nos jodemos… ¿No podremos decir: ¡Ya
basta!?
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